El pasado viernes 16 se llevó adelante el festejo de carnaval recordando las costumbres de nuestra niñez, cuando eran jornadas de disfrute y bromas entre vecinos.
Bajo la consigna Libre de Enojos, las instalaciones del CIC fueron testigo de una jornada que comenzó con juegos grupales y término a todos bailes con el cuarteto característico.
El patio de juegos del Centro, fue ganado por chicos y grandes que llevaron adelante juegos de equipos, donde la excusa era compartir y redescubrir el carnaval.
Promediando la tarde, se generó uno de los momentos más esperados, juego libre de agua, recordando los tiempos en que nos armábamos con bombas de agua, baldes o pomos para llevar adelante la complicidad de mojar a cualquier participante que esté al alcance.
Los más chicos se sorprendían con el afán que sus padres, tíos y abuelos disfrutaban una tarde de juegos, donde nadie estaba de ser alcanzado por algún vecino y quedar literalmente bañado, terminando en una carcajada y posterior venganza liquida.
Cuando el sol comenzó su retirada y las “aguas se calmaron”, los talleres de murga y máscaras tomaron el centro de la escena. Durante estas actividades se fueron preparando en la forma de baile y canto de murgas junto a comparsas, para decorarlo con las clásicas caretas utilizando material reciclado.
Con la intención de fomentar una tradición que nace en nuestra localidad, la Agencia Córdoba Joven entrego instrumentos para formar una murga local, dentro del programa Batiendo el Parche.
Con las primeras estrellas se proyectó el documental CARNAVAL ADENTRO, recordando los míticos corsos del barrio de San Vicente.
Con la noche ya declarada comenzó el tramo final del festejo, abriendo las presentaciones la comparsa Los Peques y Perfect Dance, donde desde sus distintas formaciones, regalaron colorido, baile y espíritu de fiesta.
Abuela Papota y Mandale Chicharron fueron las murgas que mezclaron composiciones propias y versiones del cancionero rioplatense.
El final de la noche rememoro los famosos bailes de carnaval, donde la La Característica Orquesta, ofreció su repertorio de cuarteto, paso doble y foxtrot, recuperando el cancionero clásico de La Leo.
Con la madrugada ya instalada y los cuerpos agotados, Anisacate cerraba su primera noche de una nueva tradición.